1- Busca un espacio en el que puedas ubicar tu zona de trabajo, en el que puedas encajar un escritorio o si ya tienes una zona con una mesa, fíjate que tenga la suficiente superficie para poder colocar tus herramientas de trabajo: ordenador, documentación, teléfono, etc. Es muy importante que este espacio esté libre de obstáculos innecesarios, sea un rincón o un frente de pared, libéralo.
Mantener ordenada tu zona de trabajo es paz mental. Intenta tener siempre ordenado este espacio, de forma que no altere al resto de estancias de la vivienda. Es una buena manera de mantener el equilibrio en tu hogar y te hará desconectar en las horas que no estés trabajando.
2- Siempre que sea posible sitúalo cerca de una ventana, el aporte de luz natural es beneficioso y hará que controles de mejor manera las franjas horarias. Nunca de espaldas a la entrada de luz para evitar brillos en las pantallas.
Tanto si tu espacio de trabajo se encuentra cerca de una ventana como si no, recuerda siempre tener una lámpara de escritorio de luz neutra, para reforzar la falta de luz. Si eres diestro la posición correcta es a la izquierda y si eres zurdo a la derecha, de esta manera evitarás que se formen sombras al trabajar.
3- Dale un toque con algún material natural, como la madera, te generará una sensación más acogedora. Puedes aplicarlo tanto en el escritorio, como en los objetos que sitúes en la pared. Si tu estilo es más industrial, prueba a mezclar el tablero de madera con una patas de hierro lacado en negro. Y no te olvides de la ergonomía, la altura ideal de un escritorio es de 75 cm. y la elección de una buena silla de trabajo es fundamental.
4- Completar tu oficina en casa con algún objeto natural, como una pequeña planta, aportará frescura. Otra opción puede ser una lámina colgada o una balda en la que poder situar las plantas. Si eres una persona a la que le gustan los aromas, añade un toque más a este espacio con algún ambientador natural o bien, que tus pequeñas plantas sean aromáticas. Tu espacio de trabajo debe de ser motivador para ti, piensa en ello a la hora de elegir estos objetos.
5- Si quieres dar un último toque a esta zona cambia el color de las paredes a una tonalidad suave o de color blanco, ganarás en amplitud espacial y en capacidad de concentración. Si no puedes disponer de una estancia completa y quieres más intimidad, un elemento como un biombo es una buena solución para separar la zona de trabajo del resto de la estancia. Si en tu trabajo realizas video conferencias, piensa en qué verán los demás detrás de ti.
Dependiendo del tipo de trabajo que desarrolles, elige un fondo más formal o algo más personal, como una lámina. Una buena opción es un fondo neutro, libre de objetos personales como fotografías o recuerdos. Prueba a completarlo con un cuadro si quieres alguna decoración.
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